El tren que solo pasa una vez
«Llegué buscando, en primer lugar, una experiencia personal que me permitiera salir por completo de la zona de confort de mi hogar y me diera la oportunidad de conocer otra cultura»
Juan Villegas (J.V.): ¿Por qué está en Colombia?
Carlos Rodríguez (C.R.): Llegué buscando, en primer lugar, una experiencia personal que me permitiera salir por completo de la zona de confort de mi hogar y me diera la oportunidad de conocer otra cultura; en segundo lugar, una experiencia profesional que me conecte con la docencia, en especial la universitaria, ya que era un campo que me apetecía probar desde hace mucho; y en tercer lugar, la elaboración de investigación académica, contando con disponibilidad y recursos para su realización [sic].
C.R.: Ninguna en específico. Lo rutinario supongo, debía conocer el proceso administrativo y de legalidad vigente, tanto en España como en Colombia. Tuve que planificarme, cuadrar fechas de viaje y llevar a cabo el proceso para conseguir la visa en el Consulado de Colombia, en Madrid, demostrando los motivos de mi viaje, los cuales, en este caso, eran por causas laborales. Considero que este proceso es bastante sencillo para las personas que provienen de la Unión Europea, en comparación a otros países que no sostienen una relación diplomática con Colombia [sic].
J.V.: ¿Por qué llegó a la ciudad de Ibagué y no a otra del país?
C.R.: Como lo dije anteriormente, por simple casualidad. Creo que este 'tren' de Colombia o Ibagué pasó por delante de mi casa y decidí subirme pensando en que sólo podía pasar una vez [sic].
J.V.: ¿Qué aspectos extraña de su cultura?
C.R.: Teniendo en cuenta que la cultura latinoamericana y la española son prácticamente hermanas, las diferencias giran en torno a lo minoritario en vez de lo mayoritario. En lo minoritario hay pequeños detalles que pueden llegar a ser relevantes, pero no tienen mucho peso; en lo mayoritario, ambos países comparten el idioma, historia e identidad, así que no hay ningún problema. Cuando los ciudadanos latinoamericanos llegan a España, su proceso de integración es muy fácil, igualmente los ciudadanos españoles cuando llegan a Colombia, obviamente hay que adaptar determinados comportamientos, pero esto no toma mucho tiempo [sic].
J.V.: ¿Cuáles han sido las dificultades que ha tenido para acoplarse a la cultura colombiana?
C.R.: Definitivamente el ritmo de productividad, aquí es menos exigente en comparación a España, se suelen posponer los trabajos que requieren de un mayor esfuerzo y los tiempos de ejecución son muy flexibles. No soy muy compatible con esto [sic].
J.V.: ¿Cómo lo tratan las personas del país?
C.R.:Muy bien la verdad, me he sentido muy cómodo. No he vivido hasta el momento ninguna situación que me haya hecho cuestionarme al respecto [sic].
J.V.: ¿Qué aspectos le gustan de esta cultura?
C.R.: Su sentido de pertenencia y sus relaciones familiares, poseen vínculos muy fuertes en relación al círculo más cercano (hijos, padres, abuelos) como en el que es un poco más distante (tíos, primos, sobrinos), es algo que todavía conservan y que en Europa se ha venido perdiendo con los años [sic].
J.V.: ¿Qué aspectos le gustaría que cambiara esta cultura?
C.R.: Colombia como estado tiene varios retos por delante. El primero, sería aumentar su productividad, sabiendo que no es algo fácil, también se deben aumentar los niveles de formación, transparencia y rendición de cuentas, ya que son condiciones necesarias para que el país pueda funcionar correctamente. Es necesario que el gobierno no oculte sus decisiones, tanto si son buenas o malas, deben ser explicadas y compartidas a los ciudadanos, hay bastante corrupción en cuanto a esto y no existen instituciones públicas que fiscalicen ni tampoco medios de comunicación independientes que sean capaces de hacerle un escrutinio al gobierno como se debería [sic].
J.V.: ¿Usted está de acuerdo con la afirmación de algunos extranjeros que dicen que los colombianos somos perezosos?
C.R.: No es bueno generalizar, considero que no es del todo cierto, pero es necesario que los ciudadanos de este país dejen de aplazar sus obligaciones [sic].
C.R.: Prefiero el tamal por encima de la lechona, aunque el plato tolimense servido con 'copete' es muy rico, también me gustan mucho los patacones, pero me quedo con la gran variedad de frutas y verduras [sic].
C.R.: Bastante caluroso para mi gusto, aunque caigan lluvias de vez en cuando [sic].
J.V.: ¿Le gustaría quedarse por más tiempo en el territorio colombiano?
C.R.: ¡Por supuesto! es parte de mi experiencia como turista[sic].
Realizado por: Juan Esteban Villegas, estudiante del Programa de Comunicación Social y Periodismo de la Universidad de Ibagué.